Este pequeño parque es uno de los más extraordinarios y sorprendentes del país. Las fuerzas de la naturaleza han creado caprichosas formas en las montanas de roja arenisca, destacando en su prodigiosa obra la talla de mas de dos mil arcos, de distintas formas tamaños y disposiciones.
El observador, en su perplejidad, no encuentra explicación a tal alarde de habilidad propiciado por el inconsciente influjo de un fenómeno natural.
En este parque se da la mayor concentración de arcos naturales del mundo.
La entrada a este parque resulta espectacular, tanto si se hace en coche como si se toma un sendero que discurre entre altos monolitos de arenisca roja, de increíbles formas, llamado Park Aveneu. Este es el camino que tomamos en las dos ocasiones que visite este parque, hasta alcanzar el vehiculo que nos esperaba en la carretera.
En este sitio se han rodado escenas de varias películas, como las últimas que reconocí de “Telma y Louise”.
Para la visita de este parque la mejor base es una pequeña ciudad próxima, llamada Moab, desde la que además de Arches, nosotros partimos hacia otros dos puntos del programa de viaje: Canyonsland y el Gran Cañón del Colorado.
La mejor época para visitar este parque, seria la primavera y el otoño. En verano hace demasiado calor y la afluencia turística es mayor, aunque los meses en que yo estuve fueron julio y agosto.
Esta maravilla de la Naturaleza, no hace concesiones al desánimo o la frustración, y la sorpresa y la gratificación están garantizadas para el visitante.
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